En este proyecto, rediseñamos la identidad del teatro El Picadero de Buenos Aires. Este teatro tiene una historia de rebeldía y revolución, ya que durante la última dictadura militar fueron la sede del Teatro Abierto, hasta que fue prendido fuego por los militares, como forma de intimidación y para tratar de destruir lo que se gestaba dentro suyo.
Tomando esta idea de rebeldía, quisimos reimaginar su identidad actual, para que su actitud tenga relación con estos orígenes.
Desde el punto de vista estético, quisimos mostrar rupturismo y revolución. Por medio de la superposición de imágenes además mostramos el interior, la ideología, lo que está oculto. Lo que está cerrado se muestra y se abre, está a disposición de los que se animen a mirar. Los colores primarios, entonces, son una base simple que al combinarse por medio de estas superposiciones se hace complejo. A partir de la simpleza se puede ver lo que está oculto.
Desde el punto de vista de la curaduría de las obras presentadas, elegimos que sea un teatro de vanguardia, con obras de teatro nacionales e internacionales pero con el denominador común de la experimentación, de la osadía en las puestas en escena, y de tramas que denuncien la sociedad y realidad actual.
Panel marcario, con el logo, sus aplicaciones y sus configuraciones. También se sientan las pautas para el sistema gráfico (colores, tipografías, etc)
Aplicación del sistema gráfico en los carteles, afiches y programa del teatro. Es una muestra como ejemplo de como funcionaría el sistema en diferentes aplicaciones, y hacia que lados podría ampliarse para otros usos.
Afiche programático informativo de las obras, eventos y actividades en un período de tres meses.
Remera parte del merchandising oficial del teatro.
Frente y dorso de una de las tote bags parte del merchandising oficial del teatro.
