Este documental fotográfico busca mostrar la paradoja social que existe para estas personas con diversos problemas mentales o afectados por una perturbación emocional y como son en parte aislados e ignorados por la sociedad y sus autoridades, los cuales muchas veces atentan contra su integridad física y moral. Las personas que tiene una enfermedad mental tienen afectado su tono afectivo, su conducta y la manera en que se comunican con otras personas. La salud mental y la enfermedad mental depende de nuestro estilo de vida, de la calidad de las relaciones afectivas que tenemos, de nuestra capacidad de amar y aceptar a los demás, de dar confianza, apoyo y aceptarlos con tolerancia. En el Perú más de 280.000 personas sufren de esquizofrenia, trastorno caracterizado por alteraciones en diferentes funciones mentales. Este mal suele iniciarse entre los 15 y 25 años de edad en varones, y entre los 25 y 35 años en las mujeres, de los cuales tan solo el 62% tiene diagnóstico definido y recibe tratamiento mientras que el grupo restante no acude a los servicios de salud y/o no tienes recursos para ser atendido por un médico psiquiatra. El interés de hacer este documental nace del hecho que querer aproximarme a algo totalmente lejano, a lo desapercibido por mucho pero que sin lugar a duda es inevitable, pues esta enfermedad es totalmente ajena a razas, religión, edad, sexo, nivel socioeconómico, etc., simplemente le puede tocar a cualquiera.
