O valor das cousas é moi relativo. Depende de moitos fatores e principalmente dos olhos de quem o vê. Tamém na arte, e na urbana, mais se lhe cadra. Onde alguns vem apenas um garavato, um ato de vandalismo ou simple sujiedade, outros conseguem ver a arte em si.

As moedas de curso legal, os bilhetes ou o bitcoin e as criptomoedas, são apenas contratos coletivos celebrados para concordar que um pedaço de latão, ums anacos de papel impressos ou um código na Blockchain valem tanto coma um saco de moedas de ouro. Acordos cos que decidimos dar valor coletivamente a algo tangível ou intangível, algo em que todos decidimos confiar que tem valor e que nos serve para trocar, dar, receber, etc.

Como artistas urbanxs, há muito tempo ja que levamos ponhemdo en valor a nossa arte e defendemdo que ela tem tanto valor (tangível e intangível) como a arte convencional que podemos encontrar em museus ou galerias. Ao final de contas, a única cousa que muda é o suporte e o formato. Mas nada mais.

Dende o festival de arte urbana Desordes e Mutante Creativo (os organizadores e o estudo criativo do que formo parte co meu companheiro Møu) defendemos este tipo de arte fai 16 anos, divulgando-a, fazendo-a acontecer, expandindo-a, que se conheza e en resumo que se valorize. 

Este ano, por primeira vez, alcançámos um pacto social no que o conjunto de concelhos que componhem a Mancomunidade de Ordes (Ordes, Cerceda, Oroso, Frades, Mesía, Trazo e Tordoia), reconhecem o extenso legado de Desordes como um valor patrimonial comum, como património artístico e cultural a ser cuidado, respeitado e promovido como Geodestino Artístico. Expandindo-se tamém aos restantes concelhos, para fazer que esta grande galeria de arte ao ar livre se estenda, tornando todo o território num Geodestino Artístico.

Voltando ao início: o valor está na retina de quem o vê...

E ao reconhecer o valor que temos, apoiando-o e promovendo-o, adquiriremos mais valor.

Alguns podem ver um simple e vulgar croio, moitos outros podemos ver pedras preciosas nas nossas mãos…

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El valor de las cosas es muy relativo. Depende de muchos factores, y principalmente de los ojos de quién lo mira. El del arte también, y del urbano, más si cabe. Donde unos solo ven un garabato, un acto de vandalismo o simple suciedad, otros podemos ver arte en si mismo.

Las monedas de curso legal, los billetes, o el bitcoin y las criptos, solo son contratos colectivos a los que se llegó para ponernos de acuerdo en que un trozo de latón, unos papeles impresos o un código en la blockchain valen tanto como un saco de monedas de oro. Pactos con los que decidimos darle valor colectivamente a algo tangible o intangible, algo en el que todos decidimos confiar en que tiene un valor, y que nos sirve para intercambiar, dar, recibir, etc..

Las/los artistas urbanxs llevamos mucho tiempo poniendo en valor nuestro arte y defendiendo que tiene tanto valor (tangible o intangible) como el arte convencional que podemos encontrar en museos o galerías. Al fin y al cabo lo único que cambia son el soporte y el formato, pero nada más.

Desde el festival de arte urbanoi DesOrdes Creativas y Mutante Creativo (los organizadores y el estudio del que formo parte junto a mi compañero Møu) , llevamos ya 16 años defendiendo este tipo de arte, promoviéndola, promocionándola, haciendo que suceda, que se expanda, que se conozca y en definitiva que se valore.

Este año por primera vez conseguimos un pacto social en el que el conjunto de ayuntamientos que conforman la Mancomunidad de Ordes (Ordes, Cerceda, Oroso, Frades, Mesía, Trazo y Tordoia), reconocen como un valor patrimonial común el extenso legado del DesOrdes, como un patrimonio artístico y cultural a cuidar, respetar y promover como Geodestino Artístico. Expandiéndolo además al resto de ayuntamientos, para hacer que esta gran galería de arte a cielo abierto se extienda a toda la mancomunidad convirtiendo en un Geodestino artístico a todo el territorio. 

Volviendo al principio: el valor, solo está en la retina de quién lo mira… Y reonociendo el valor que tenemos, apoyándolo y promocionándolo, adquiriremos más valor.

Unos pueden ver un simple y vulgar pedrusco, otros podemos ver piedras preciosas en nuestras manos…